La Journée de la jupe
Justo ese día en que Mme Bergerac está a un paso de tirar la toalla rodeada de estudiantes que la insultan y la desprecian por su aspecto justificándose en el Coran, la profesora de francés descubre un arma entre las pertenencias de uno de ellos. Y ya llegados a ese punto, por qué no aprovechar la situación y utilizarla para dar un curso de Literatura en condiciones, además de proponer a esos cretinos de la autoridad gubernamental una desesperada reivindicación, algo que suena tan extraño como “El día de la falda”. La jornada en la que las estudiantes de toda Francia puedan lucir como prefieran sin ser insultadas, agredidas ni molestadas. Especialmente con ese aspecto que hace tiempo ya no es aconsejable en las áreas urbanas con fuerte presencia de inmigración islámica, si una mujer quiere hacer un poco tranquila su vida cotidiana.
Isabelle Adjani regresaba en 2008 a las pantallas para interpretar una historia que no abandona la actualidad, ahora además, recién puesta en marcha la prohibición del velo integral en las calles francesas. Una historia que nació enfrentada al rechazo de algunos productores demasiado asustados para hablar de tantos fracasos a la vez, y todos, con inmigrantes de por medio. El fracaso de la multiculturalidad descontrolada, el de la crisis social infiltrada desde hace años en los grandes suburbios de Francia y el de la rendición de la educación pública ante el desafío de quienes no comparten los valores de la República, pero tampoco tienen planes de abandonarla.
Y por encima de todo, la historia personal de una profesora verdaderamente indignada y deprimida que nunca imaginó que al fin de tantos años de “feminismo en pantalones”, ella misma acabaría reivindicando la falda, a punta de pistola.
La Journée de la jupe, de Jean Paul Lilienfeld (2008) pensada para televisión por no encontrar respaldo en un principio, para los teatros de cine.
Tags: Isabelle Adjani
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historias de bedlam 
June 16, 2011 at 5:58 am
El multiculturalismo es imposible si resulta que una de las “culturas” lo que pretende es el monoculturalismo, tratando de imponerse como única forma de vida posible y desterrar a las que están radicadas en su hábitat natural.
Pensar en un panorama multicultural en Europa me resulta, dadas las circunstancias, ingenuo e irrealizable.
Muchas cosas tienen que cambiar para que sea posible.
un saludo, me alegra volver a leerte :D
June 17, 2011 at 7:48 am
Y ademas, hay culturas y costumbres ( y no es lo mismo cultura que costumbres) suficientemente cercanas como para convivir en un equilibrio razonable si es necesario, pero lo que no puede convivir es la aceptacion de unos derechos y libertades y la no aceptacion de ellos, todo junto.
Esta pelicula marca una realidad que si no ha llegado a otros paises, llegara.
Encantado de verte por aqui Rain, :)
July 5, 2011 at 3:42 am
Cuando voy a hospitales o institutos pienso en la paciencia y en cómo se ganan el pan esos funcionarios día a día aguantando una serie de cosas. Como profesiones con una supuesta vocación te pueden llevar a la desidia, e incluso a la enfermedad.
Y lo necesario que es un profesor que sepa enseñar…
Se van a necesitar muchas profesores como ésta, Sam, no que empuñen la pistola del alumno, si no que reinvindiquen valores como el de llevar una falda.
Aún así, en los colegios españoles todavía no ha llegado ese problema. Más bien están luchando con las tangas…xD.
Un beso, Sam.